Nos reembolsaron sin siquiera preguntar, y los muchachos de Bigfoot nos prepararon todo para la caminata de hielo del día siguiente a la hora que lo necesitábamos, con 2 guías para una excursión casi privada. La caminata fue maravillosa, con personas muy bien preparadas que saben exactamente qué hacer en términos de seguridad y se aseguran de tener una experiencia completa, incluso trayendo té especiado para disfrutar en el glaciar, tomando fotos increíbles y mostrando sitios de interés. La calidez y el compromiso de la gente es el complemento perfecto para la maravilla del paisaje.